La cirugía ICL (Implantable Collamer Lens) es una excelente opción para corregir miopía alta, hipermetropía y astigmatismo sin alterar la córnea. Pero, ¿a qué edad es recomendable realizarla?
El ICL (EVO Visian) es un lente de colágeno biocompatible que se implanta dentro del ojo, entre el iris y el cristalino.
Ventajas vs. LASIK/PRK:
Corrige miopías muy altas (hasta -18D).
Reversible (se puede extraer si es necesario).
No causa ojo seco crónico.
Rango Óptimo: 21 a 45 años
Consideraciones
<21 años
NO, Graduación aún puede cambiar.
21-40 años
Ideal, máximo beneficio a largo plazo.
40-50 años
Depende, Si no hay presbicia avanzada.
50+ años
No recomendado, Mejor opción: LIO multifocal en cirugía de cataratas.
Graduación estable: En adultos jóvenes (20-40), la miopía ya no progresa.
Cristalino transparente: El ICL no trata cataratas (si ya hay opacidad, mejor operar con LIO convencional).
Máximo beneficio visual: Aprovechas más años sin gafas.
Si hay presbicia, puede requerirse monovisión o lentes multifocales.
Si hay cataratas incipientes, es mejor esperar y usar una LIO premium.
Atletas: Resistente a impactos (ideal para deportes de contacto).
Córneas delgadas: Opción segura cuando el LASIK no es viable.
Calidad visual superior: Mejor visión nocturna que LASIK en altas miopías.
Lente Intraocular Fáquica ICL Staarsurgical
La ICL (Implantable Collamer Lens) es una lente intraocular fáquica (es decir, se implanta sin extraer el cristalino natural del ojo) diseñada para corregir defectos refractivos altos, como:
Miopía (hasta -18 dioptrías).
Astigmatismo (hasta 6 dioptrías).
Es una alternativa a la cirugía láser (LASIK/PRK) para pacientes con córneas delgadas, ojo seco o graduaciones muy altas que no son candidatos a técnicas ablativas.
1. Material: Collamer®
Biocompatible: Compuesto de colágeno y polímero que reduce el riesgo de inflamación o rechazo.
Protección UV: Filtra los rayos ultravioleta.
Transparencia óptica: No afecta la calidad visual.
2. Diseño
Ultrafina y flexible: Se implanta plegada a través de una microincisión (2–3 mm).
Posición anatómica: Se coloca en la cámara posterior, entre el iris y el cristalino.
Versión tórica: Para corregir astigmatismo (debe alinearse en un eje específico).
3. Modelos Actuales
EVO Visian ICL: Incluye un orificio central (360 µm) que mejora el flujo del humor acuoso, reduciendo el riesgo de glaucoma.
Reversible: Puede extraerse si es necesario.
No altera la córnea: Ideal para córneas delgadas o irregulares.
Resultados inmediatos: Mejoría visual en 24–48 horas.
Amplio rango de corrección: Incluye miopías extremas.
Pasos Quirúrgicos para el Implante de ICL
Topografía corneal y biometría: Para calcular el tamaño exacto de la ICL.
Gonioscopia: Evaluar espacio entre iris y cristalino (cámara posterior).
Midriasis: Dilatación pupilar con gotas (ej: ciclopentolato + fenilefrina).
Tópica (gotas anestésicas) + sedación leve.
2–3 microincisiones (1–2.8 mm) para:
Inserción de la ICL.
Irrigación y manipulación del iris.
Protege el endotelio y mantiene la cámara anterior.
Carga de la lente en el inyector:
La ICL (plegada) se inserta a través de la incisión principal.
Liberación en cámara posterior:
Se despliega suavemente detrás del iris y delante del cristalino.
Posicionamiento:
Las patas hapticas deben quedar bajo el iris (en el surco ciliar).
En ICL tóricas, se gira al eje calculado preoperatoriamente.
Aspiración minuciosa para evitar hipertensión ocular postoperatoria.
Se valora si requerire suturas o no.
La lente ICL (como la EVO Visian ICL de STAAR Surgical) es una opción segura y reversible para corregir miopía, hipermetropía y astigmatismo altos, especialmente en pacientes no candidatos a LASIK o PRK. Su montaje adecuado es crucial para:
Evitar complicaciones:
Rotación de la lente (en astigmatismo).
Contacto con el cristalino (riesgo de catarata).
Presión intraocular elevada (si no queda espacio suficiente).
Garantizar resultados visuales óptimos:
Posición centrada sobre el iris.
Correcto alineamiento del eje (en lentes tóricas).
Minimizar manipulación intraoperatoria:
Reduce trauma en el endotelio corneal y el iris.
Selección precisa del tamaño (basado en anatomía ocular).
Técnica quirúrgica meticulosa (evitar rotación o descentrado).
Protección del endotelio y cristalino.
La cirugía ICL (Implantable Collamer Lens) es significativamente más costosa que el LASIK debido a factores como la tecnología utilizada, la complejidad del procedimiento, los materiales de alta calidad y los requisitos de personalización. A continuación, te explicamos las razones detalladas:
Material premium: Las ICL están hechas de Collamer, un biomaterial patentado (colágeno + polímero) que es biocompatible y permite el paso de nutrientes.
Cada lente se fabrica según las medidas exactas del ojo del paciente (biometría de alta precisión).
Las ICL tóricas (para astigmatismo) requieren alineación milimétrica.
Procedimiento intraocular: La ICL se coloca dentro del ojo (entre el iris y el cristalino), lo que requiere:
Anestesia tópica + sedación.
Incisión corneal pequeña (2–3 mm).
Posicionamiento preciso para evitar contacto con el cristalino o el endotelio corneal.
Riesgo potencial: Mayor que en el LASIK (aunque bajo en manos expertas).
Antes de una ICL, se requieren exámenes avanzados que encarecen el proceso:
Biometría de alta resolución (IOLMaster, Lenstar).
Microscopía endotelial (para contar células corneales).
Gonioscopía (evaluar ángulo camerular).
Topografía corneal (descartar queratocono y medicion de White to White (WW)).
En el LASIK, solo se necesitan topografía y paquimetría.
La ICL requiere controles de presión intraocular (riesgo de glaucoma).
Posible necesidad de ajustes si el lente se descentra.
Revisiones a largo plazo para detectar cataratas precoces (aunque es raro con las ICL modernas).
Trata miopías muy altas (hasta -18D) que el LASIK no puede corregir.
Reversible (el lente puede extraerse si es necesario).
No altera la córnea (ideal para córneas delgadas o irregulares).
Mejor visión nocturna que el LASIK en graduaciones altas.
Sí, si tienes miopía muy alta, córneas delgadas o no eres candidato a LASIK.
No, si tu graduación es baja y tu córnea es apta para LASIK o SMILE.
Los lentes ICL (como la EVO Visian ICL) son una excelente opción para corregir miopía, hipermetropía y astigmatismo altos, pero no todos los pacientes son candidatos ideales. Estas son las razones principales:
La ICL necesita un espacio mínimo entre el iris y el cristalino (≥2.8 mm).
Si el ojo es muy pequeño (longitud axial <20.5 mm), el lente puede rozar el cristalino, aumentando el riesgo de catarata precoz.
Si el ángulo entre el iris y la córnea es <30 grados (gonioscopía), hay riesgo de glaucoma agudo por bloqueo pupilar.
Se requieren ≥2,000 células/mm² para garantizar seguridad. Menos células → riesgo de edema corneal.
Miopía: Hasta -18 dioptrías (EVO ICL).
Hipermetropía: Hasta +10 dioptrías.
Astigmatismo: Hasta 6 dioptrías (ICL tórica).
Fuera de estos límites, se necesitan alternativas como PRK o lentes intraoculares fáquicos alternativos.
La ICL se coloca delante del cristalino. Si ya hay opacidad, es mejor extraerlo y usar un lente intraocular convencional.
La ICL podría aumentar la presión intraocular (PIO) en ojos con drenaje comprometido.
Riesgo de inflamación severa o edema macular.
Pacientes >45 años: La presbicia ("vista cansada") puede requerir lentes multifocales en lugar de ICL.
Pacientes <21 años: La graduación puede no estar estabilizada.
Embarazo/lactancia (cambios hormonales afectan medidas).
Enfermedades autoinmunes no controladas (lupus, artritis reumatoide).
Alergia al material Collamer (colágeno + copolímero).
PRK o LASIK: Para córneas sanas con graduaciones moderadas.
Lentes intraoculares multifocales: Si hay presbicia asociada.
Cross-linking + PRK: En queratocono leve con miopía.
Pentacam en Queratocono Leve
Conserva un Astigmatismo Regular
Buena grosor corneal
Posible buen candidato para lente intraocular ICL
El queratocono es una enfermedad corneal progresiva que provoca visión distorsionada debido al adelgazamiento y deformación de la córnea. Mientras que los tratamientos como el crosslinking (CXL) y los anillos intracorneales ayudan a frenar su progresión, muchos pacientes siguen teniendo mala agudeza visual incluso con gafas o lentes de contacto.
Aquí es donde entra la lente intraocular fáquica ICL (Implantable Collamer Lens), una opción segura y eficaz para pacientes con queratocono que desean una mejora visual significativa sin alterar la córnea.
La ICL es una lente de material Collamer (biocompatible y flexible) que se implanta dentro del ojo, entre el iris y el cristalino, sin necesidad de extraer tejido corneal.
✅ Corrige altos grados de miopía, hipermetropía y astigmatismo asociados al queratocono.
✅ No debilita la córnea (a diferencia del LASIK o PRK, que están contraindicados en queratocono).
✅ Proporciona una visión más estable y nítida que los lentes de contacto rígidos en córneas irregulares.
✅ Es reversible (puede retirarse si cambian las condiciones oculares).
✅ Protección UV integrada (el material Collamer bloquea los rayos dañinos).
✔ Pacientes con queratocono estable (sin progresión reciente, idealmente después de CXL).
✔ Miopía o astigmatismo alto que no se corrige bien con gafas o lentes de contacto.
✔ Córnea demasiado delgada o irregular para cirugía láser.
✔ Edad entre 21-45 años (antes de la aparición de cataratas).
❌ Queratocono en progresión activa (primero debe realizarse crosslinking).
❌ Cámara anterior ocular muy estrecha.
❌ Enfermedades oculares graves (glaucoma avanzado, retinopatía).
Estudio preoperatorio completo:
Topografía corneal.
Paquimetría.
Biometría para calcular la potencia exacta de la lente.
Evaluación del endotelio corneal.
Cirugía ambulatoria (15-20 min por ojo):
Anestesia en gotas/sedación.
Microincisión indolora (<3 mm).
Implantación de la ICL plegable.
Recuperación rápida:
Visión útil en 24-48 horas.
Gotas postoperatorias por 1-2 semanas.
Mejora del 90-100% en agudeza visual (muchos pacientes logran 20/20 o mejor).
Reducción o eliminación de la dependencia de gafas/lentes de contacto.
Calidad visual superior a lentes rígidos en córneas irregulares.
Ventajas: Mejora visión en córneas irregulares
Desventajas: Incomodidad, riesgo de infecciones
Ventajas: Aplanan la córnea
Desventajas: No corrigen todo el defecto refractivo
Ventajas: Frena la progresión
Desventajas: No mejora la visión por sí solo
Ventajas: Solución para casos avanzados
Desventajas: Riesgo de rechazo, recuperación larga
Ventajas: Máxima calidad visual sin tocar la córnea
Desventajas: Costo más elevado