Catarata Nuclear vista en lampara de hendidura
La catarata es la opacidad del cristalino natural del ojo, que provoca visión borrosa, deslumbramientos y dificultad para leer o conducir. Es la principal causa de ceguera reversible en el mundo.
Inicio: A partir de los 40–50 años (cambios iniciales, pero sin síntomas).
Progresión: Se vuelven significativas después de los 60 años.
Diabetes.
Exposición al sol sin protección UV.
Tabaquismo.
Uso prolongado de corticoides.
La cirugía se recomienda cuando:
La visión afecta tu calidad de vida (dificultad para leer, conducir o reconocer rostros).
El oftalmólogo confirma que la catarata es la causa (no otro problema ocular).
No hay contraindicaciones médicas (infecciones o enfermedades oculares no controladas).
50–60 años
Poco común. Solo si hay cataratas tempranas por trauma o enfermedades.
60–70 años
Más frecuente. Edad típica para operarse con lentes intraoculares (LIO).
70+ años
Muy común. Máxima seguridad y resultados predecibles.
Cataratas muy avanzadas son más difíciles de operar (mayor riesgo de complicaciones).
Pérdida de independencia (caídas, accidentes por mala visión).
Menor calidad de vida (dificultad para actividades cotidianas).
La cirugía de catarata no solo elimina la opacidad del cristalino para restaurar la visión, sino que también es una oportunidad para corregir defectos refractivos (miopía, hipermetropía, astigmatismo e incluso presbicia). Hoy en día, es tanto un procedimiento terapéutico como refractivo.
Recuperación de la visión nítida:
Elimina la opacidad del cristalino que causa visión borrosa, deslumbramientos y dificultad para leer o conducir.
Prevención de ceguera:
Las cataratas avanzadas son la principal causa de ceguera reversible a nivel global.
Independencia del paciente:
Reduce la dependencia de lentes gruesos o ayudas visuales.
Al reemplazar el cristalino opaco por una lente intraocular (LIO), se puede corregir:
Miopía/hipermetropía: Con LIOs monofocales tóricas.
Astigmatismo: Con LIOs tóricas.
Presbicia ("vista cansada"): Con LIOs multifocales o trifocales.
Técnicas Avanzadas:
Biometría de última generación (IOLMaster, Barrett Formula): Calcula la potencia exacta de la LIO.
Femtofaco: Uso de láser femtosegundo para incisiones y fragmentación de la catarata (mayor precisión).
LIOs Premium: Multifocales, EDOF (extended depth of focus) o acomodativas.
Rápida recuperación (24–48 horas para actividades cotidianas).
Anestesia tópica (gotas, sin inyecciones).
Cirugía ambulatoria (sin hospitalización).
La cirugía de cataratas es un procedimiento oftalmológico común que implica la extracción del cristalino opacificado y su reemplazo por una lente intraocular artificial para restaurar la visión. A continuación, se describen los pasos quirúrgicos típicos de esta intervención:
Administración de anestesia y dilatación de la pupila: Se aplican gotas anestésicas para adormecer el ojo y se utilizan medicamentos para dilatar la pupila, facilitando el acceso al cristalino afectado.
El cirujano realiza una pequeña incisión en la córnea, permitiendo la introducción de instrumentos quirúrgicos en el ojo.
Se crea una abertura circular en la cápsula anterior del cristalino para acceder a la catarata.
Mediante un dispositivo de ultrasonido, se fragmenta y aspira el cristalino opacificado.
Se introduce una lente artificial plegable a través de la incisión y se coloca en la cápsula vacía del cristalino, restaurando la capacidad de enfoque del ojo.
La incisión es autosellante y generalmente no requiere suturas, permitiendo una recuperación más rápida.
Este procedimiento suele durar menos de una hora y se realiza de forma ambulatoria. La mayoría de los pacientes experimentan una mejora significativa en la visión en pocos días. Es fundamental seguir las indicaciones postoperatorias del oftalmólogo para asegurar una recuperación óptima.
Video de CIRUGÍA de CATARATA de Grado Medio de DIFICULTAD: Pasos Quirúrgicos y Nivel de Dificultad
En este video, se observa una cirugía de catarata de dificultad media, típica de un núcleo blanco-amarillento (LOCS III Grado II–III). Aunque ningún procedimiento quirúrgico es "fácil", este caso representa un equilibrio entre rutina y desafíos controlados, a diferencia de cataratas avanzadas (brunescentes) o con comorbilidades (pseudoexfoliación, córnea guttata).
Pasos Quirúrgicos y Dificultad Relativa
Técnica: Gotas anestésicas + sedación leve (no requiere bloqueo peribulbar).
Principal (2.2–2.8 mm) + lateral (para instrumentos).
Objetivo: Apertura circular de 5–5.5 mm en la cápsula anterior.
Inyección de BSS para separar núcleo-corteza de la cápsula.
Técnica: Divide & Conquer o Stop & Chop (para núcleos grado II–III).
Parámetros: Energía ultrasónica moderada (20–30%), flujo bajo.
Corteza residual: Adherencias moderadas (mayor cuidado en el polo posterior).
Implantación en el saco capsular sin complicaciones.
Verificación de fugas en incisiones.
Factores de Rutina:
Núcleo emulsificable sin necesidad de técnicas avanzadas (pre-chop).
Cápsula anterior intacta y pupila dilatable.
Visibilidad reducida (catarata semi-opaca vs. totalmente transparente).
Mayor manipulación instrumental para evitar estrés capsular.
Catarata Nuclear y Cortical con Lampara de Hendidura
Catarata Nuclear y Cortical con iluminación difusa
Aunque la cirugía de catarata tiene una tasa de éxito del 95-98%, ciertos factores pueden aumentar el riesgo de complicaciones intraoperatorias o postoperatorias. Estos incluyen condiciones del paciente, características del ojo y desafíos técnicos.
Glaucoma avanzado: Dificulta la visibilidad y aumenta el riesgo de presión intraocular (PIO) elevada postoperatoria.
Retinopatía diabética: Riesgo de edema macular o hemorragias.
Uveítis crónica: Mayor inflamación postoperatoria y riesgo de sinequias.
Síndrome de pseudoexfoliación: Fragilidad zonular (riesgo de luxación del cristalino o la LIO).
Pupila pequeña no dilatable (<5 mm): Dificulta la visualización del cristalino.
Córnea opaca o edema corneal: Reduce la visibilidad durante la cirugía.
Catarata hipermadura (brunescente o blanca): Mayor dureza del núcleo, requiere más energía de ultrasonido.
Diabetes mal controlada: Retrasa la cicatrización y aumenta riesgo de infección.
Anticoagulantes/antiagregantes: Riesgo de hemorragia intraocular (aunque rara vez se suspenden).
Ruptura de cápsula posterior: Puede requerir vitrectomía y colocación de LIO en surco o cámara anterior.
Síndrome de iris flácido (IFIS): Asociado a fármacos como tamsulosina (usado para próstata).
Hemorragia supracoroidea: Rara pero grave (especialmente en pacientes con hipertensión ocular).
LIOs premium (multifocales/tóricas): Mayor riesgo de disfotopsias (halos, destellos) si no se seleccionan adecuadamente.
La cirugía de cataratas es uno de los procedimientos más seguros y efectivos en oftalmología, pero no todos los pacientes son candidatos inmediatos. La decisión depende de factores oculares, sistémicos y de riesgo quirúrgico. Aquí te explicamos las situaciones que pueden limitar o retrasar la cirugía:
Edema corneal severo o cicatrices densas: Dificultan la visualización durante la cirugía.
Queratocono descompensado: Primero requiere un trasplante de córnea.
Retinopatía diabética proliferativa o desprendimiento de retina: Primero deben estabilizarse con láser o cirugía vítrea.
Degeneración macular avanzada: La cirugía de cataratas no mejorará la visión central.
Presión intraocular (PIO) muy alta aumenta el riesgo de complicaciones.
Uveítis o infecciones (ej: herpes ocular): Deben tratarse primero para evitar exacerbaciones.
Diabetes descompensada: Riesgo de infección o mala cicatrización.
Hipertensión arterial severa: Mayor riesgo de sangrado intraocular.
Enfermedades autoinmunes (lupus, artritis): Pueden afectar la recuperación.
Aspirina, warfarina, etc.: Generalmente no se suspenden, pero requieren monitoreo.
Se pospone hasta después del parto (salvo casos urgentes).
Si la catarata no afecta significativamente la calidad de vida, puede posponerse.
En pacientes muy ancianos o con demencia avanzada, se evalúa el beneficio real.
Cataratas hipermaduras (blancas o brunescentes): Mayor dificultad técnica, pero no son una contraindicación absoluta.
Síndrome de pseudoexfoliación: Riesgo de ruptura zonular (requiere técnicas especiales).
Estabilizar enfermedades subyacentes (glaucoma, diabetes).
Tratar infecciones o inflamaciones antes de la cirugía.
Femtofaco para cataratas duras.
Anillos de tensión si hay fragilidad zonular.
Lente Intraocular vista en Quirófano